Mis colegas meteorólogos muy probablemente estarán de acuerdo conmigo: el pronóstico para la próxima semana nos está dando trabajo y un gran dolor de cabeza. Sí, porque desde que la probabilidad de precipitaciones hacia la zona central apareció en uno de los modelos de meteorológicos que más se utilizan a la hora de hacer pronósticos, todo mundo volcó sus miradas hacia ellos y a lo que los meteorólogos tenemos a decir de esta predicción a tan largo plazo (10 días es “mucho tiempo” cuando hablamos de pronóstico del tiempo).
Y más aún, porque las precipitaciones que estos modelos prevén se darían en zonas donde las lluvias no son comunes en esta época del año, como es el norte del país.
Ya con algunos días transcurridos, hemos visto de todo: más lluvia, menos lluvia, nieve, nada de lluvia, lluvias nuevamente; según un modelo abarcaría una zona extensa, según el otro no tanto.

Pero en medio de este caos e incertidumbre tenemos una seguridad: la próxima semana se destacará por ser una de las más lluviosas del mes de junio en varias regiones de Chile. Todo esto, gracias a una gran zona de frontogénesis que se ubicaría frente a Chile, y que dará vida a los sistemas frontales que avanzarán por el país.
Será una semana de intensa actividad frontal. Sin embargo, aún no se define claramente cuáles serán las zonas afectadas y —obviamente— cuánta agua (o nieve) caerá por donde pasen los sucesivos frentes.
El modelo del ECMWF prevé precipitaciones hasta Antofagasta
La primera onda frontal prevista por el modelo del Centro Europeo de Pronóstico de Mediano Plazo (ECMWF) llegaría el lunes (09) a la Patagonia. Una segunda banda frontal reforzaría las precipitaciones a contar del miércoles (11), alcanzando el sur de Chile y también la zona central —Región de Coquimbo incluida.
Un tercer frente llegaría a Chile entre la madrugada y la mañana del viernes (13), impactando la Patagonia norte y la zona sur inicialmente. La proyección de su vaguada en altura dejaría precipitaciones nivales sobre la cordillera del centro norte y norte chico en la tarde de ese mismo día, mientras el frente avanza lentamente por el sur del país.
El sábado (14), esta vaguada de altura proyectaría nevadas hacia la cordillera sur de Antofagasta, con el frente frío dejando lluvias sobre toda la zona central. Con inestabilidad postfrontal que dejaría chubascos incluso durante el domingo (15).
El modelo norteamericano también proyecta precipitaciones para el norte
La historia que nos cuenta el modelo norteamericano (GFS, Global Forecast System) no comienza muy diferente de la del modelo europeo —más adelante entenderán el motivo: un sistema frontal llegaría el lunes (09) a la Patagonia y un segundo pulso de precipitaciones avanzaría por el sur del país durante el día miércoles (11).
A partir de aquí comienzan las diferencias entre los modelos de pronóstico: el modelo GFS proyecta que esta banda frontal alcanzaría el sur de la Región de Coquimbo entre la noche del miércoles y madrugada del jueves (12), dejando lluvias sobre toda la zona central, sur y la Patagonia norte.

Entre la noche del jueves y la madrugada del viernes (13), una nueva onda frontal llegaría la tercera oleada de precipitaciones al país, comenzando en la Patagonia y moviéndose hacia el sur del país el día sábado (14).
Al comenzar el domingo (15), las precipitaciones alcanzarían el centro sur, y la vaguada en altura dejaría los primeros chubascos de nieve sobre la cordillera de Antofagasta. Y hacia finales del día, el extenso frente estaría dejando lluvias entre Coquimbo y Los Lagos, con precipitaciones en toda la cordillera del norte grande.
Y por encima, ganaríamos más lluvias sobre el sur de Chile a comienzos de la segunda quincena del mes.
Y ahora, ¿quién nos podrá ayudar?
Por el momento, ni la astucia del Chapolín Colorado será suficiente para que obtengamos un pronóstico preciso.
Pero si nos guiamos por la hipótesis de que las lluvias caerán sobre el norte de Chile y también varias otras zonas del país, lo más sensato es comenzar a preparar nuestro entorno para recibirlas.

Ya sabemos que el comienzo de semana será de lluvias sobre la Patagonia, y que estas lluvias tienen opción se moverse por el sur. A comienzos de semana, podremos tener seguridad de cuánta agua caerá sobre la zona central, y si esta gran zona frontogenética llevará precipitaciones al norte del país.
¿Por qué se dan las diferencias entre los modelos?
Los modelos meteorológicos resuelven ecuaciones que predicen el comportamiento de las variables atmosféricas. Estas ecuaciones no tienen un resultado exacto, por lo que hay una serie de aproximaciones que se realizan para poder “cerrar la cuenta” y obtener un número, ya sea este temperatura, viento, presión o cualquier otra variable meteorológica.
Además, los métodos matemáticos y computacionales que se utilizan para resolver punto a punto en el mapa, nivel a nivel de altura, paso a paso de tiempo, de cada variable en el modelo, también acarrean ciertos errores.
“Estos pequeñísimos errores numéricos se van acumulando a medida que el tiempo de simulación avanza, por lo que se van haciendo más y más grandes. Es por eso que el pronóstico a muchos días no tienen gran índice de acierto”.
Sin embargo, y aún sabiendo que existe estos ‘errores’, los modelos siguen siendo la principal herramienta que utilizamos los meteorólogos para hacer nuestros pronósticos del tiempo. Sólo debemos tener la precaución de saber interpretar lo que estamos mirando, para determinar qué tan alejado o próximo puede estar de la realidad esperada.